EL MAPA, EL COFRE Y LA GRUTA
La idea de la propuesta se desarrolla sobre tres conceptos que nacen de nuestra interpretación personal, que como arquitectos, realizamos del sitio y de la propia comarca. Estos principios útiles hilvanan el programa propuesto, estructurándolo, y fundamentan:
– la organización del conjunto y su ubicación en la comarca (un mapa atractivo para recorrer de diferentes maneras). Para eso se plantea una planta con marcas en el paisaje: cabañas, actuaciones en el relieve, elementos para juego y descanso, etc. (modelo dual divulgación-experimentación);
– un núcleo de actividad cerrado (el/los cofre/s) donde resida el alma de la comarca (espacios interiores agradables para gente que comparte, aprende, ensaya y expone);
– espacios exteriores y/o interiores en tensión por su proximidad y su ubicación semienterrada, que a modo de desfiladero interpreten la complejidad de ese carácter de borde/unión que caracteriza los espacios más representativos de la comarca (agua/tierra; aéreo/enterrado; natural/antropizado; interior/mediterráneo) y que al mismo tiempo alertan de algo trascendente (esos sitios donde uno guardaría un tesoro).